El Ilang-ilang es un árbol que se cultiva en Java, Sumatra, islas Reunión, Madagascar y las Comores. Su nombre significa “flor de flores” y hay variedades de flor rosa, malva y amarilla. El aceite más puro es el que se obtiene en la primera parte del proceso por destilación al vapor, que es la de mejor calidad, mientras que la obtenida en la última parte del proceso a pesar de tener las mismas cualidades, su perfume no es tan refinado y se comercializa con el nombre de Cananga. El aroma del Ilang-ilang parece una mezcla de jazmín y almendro, es dulce, suave, floral balsámico y algo especiado. Mezcla bien con el sándalo, el jazmín y la bergamota. En Indonesia se suele cubrir el lecho nunpcial con pétalos de estas flores, en alusión a las cualidades afrodisíacas por las que es famoso su perfume.
Es uno de los aceites más agradables que existen y se puede usar cómodamente como perfume duradero o como un exótico aceite de baño.
Es antidepresivo, antiséptico, hipotensor, sedante y afrodisíaco. Se utiliza por tanto en depresiones, frigidez, impotencia, insomnio, tensión nerviosa, palpitaciones en hipertensión y en cuidado de la piel.
Su efecto sobre el sistema nervioso es eufórico, sedante e hipotensor como se indica más arriba, estando indicado en situaciones de ansiedad, tensión y presión sanguínea alta. Se dice que su aroma calma e inhibe el enojo nacido de la frustración.
Una de sus propiedades más importantes es su capacidad de frenar la respiración demasiado rápida, hiperpnea, y la frecuencia cardíaca demasiado rápida, taquicardia. Estos son síntomas que aparecen cuando la persona se encuentra ante un trauma, aterrorizado o ansioso, o quizás demasiado encolerizado, en tales casos el uso de este aceite logra un efecto inmediato.
Se utiliza en perfumería y cosmética, siendo adecuado tanto para pieles secas como grasas, ya que equilibra la secreción de sebo. Como los aceites de rosa, jazmín y sándalo, es antidepresivo, afrodisíaco y sedante, por lo que ayudará a las personas con dificultades sexuales, ya que éstas a menudo se encuentran bajo el estrés y la ansiedad.
El Ilang-ilang no debe usarse muy concentrado ni por tiempo demasiado largo, ya que puede dar origen a náuseas y/o dolor de cabeza.
En el aspecto psicológico es excelente para condiciones excitables, al regular el suministro de adrenalina y relajar el sistema nervioso, dando una experiencia de placidez. Modifica el estado físico y mental ayudando afrontar el mundo emocional desde una perspectiva diferente. El Ilang-ilang contiene capacidad para el crecimiento y la profundización de las relaciones.
Empleo seguro de los aceites esenciales:
-La automedicación es imprudente ya que ciertos aceites esenciales tienen contraindicaciones para las embarazadas, personas alérgicas o con problemas crónicos, como hipertensión o epilepsia y en el caso particular de bebes, niños y ancianos se utilizan en menor proporción y no todos son recomendados. El uso interno de los aceites esenciales debe ser controlado por facultativo médico especializado en aromaterapia.
-Mantenerlos fuera del alcance de los niños y no utilizarlos con bebés de menos de seis semanas de vida.
-Siempre que sea posible hay que comprarlos orgánicos y 100% puros; deben embotellarse en cristal oscuro y guardarse en un lugar seguro.
María José Rodríguez Pujante. Profesora de yoga